domingo, 26 de febrero de 2017


El día de mañana estaremos celebrando los 104 años de la Creación del Ejercito Mexicano.


El Ejército Mexicano es resultado de la evolución de las fuerzas revolucionarias emergidas del Ejército Constitucionalista, al ser sometido éste a la reorganización y modernización impuesto por el general Joaquín Amaro; tal programa incluyó la revalidación del grado para los altos oficiales, imposición de disciplina principalmente entre generales y jefes, profesionalizando los cuadros de jefes y clases, combatiendo la corrupción y mejorando en todos sus sentidos los servicios del ejército. Además, canalizó las aspiraciones políticas de los excombatientes revolucionarios.


Para llevar a cabo esta labor, le favoreció su permanencia al frente de la Secretaría de Guerra y Marina hasta 1931, y la fundación del Partido Nacional Revolucionario, que incluyó un sector militar que aglutinaba a los más connotados e influyentes oficiales. Fue el mismo Amaro quien condujo las actividades bélicas contra los Cristeros.

Al arribo de Lázaro Cárdenas como presidente en los primeros dos años (1934-1936, sometió el mando de la secretaría y los mandos subordinados a un cambio permanente hasta que dispuso de hombres de confianza que le permitieron afianzar el poder, lo que le permitió enfrentar con éxito las intentonas golpistas de Plutarco Elías Calles exiliándolo el 1 de abril de 1936. En 1937 se dispuso el cambio de nombre de la Secretaría de Guerra y Marina al de Secretaría de la Defensa Nacional. Finalmente, enfrentó el alzamiento de Saturnino Cedillo en 1938, así como unas insubordinaciones de menor magnitud. Es en 1941 en que los mandos del entonces Departamento de Marina Nacional, dejan de depender de la Secretaría de Guerra y Marina, creándose la Secretaría de Marina y reduciéndose la injerencia del ejército en este menester.


Habiéndose involucrado México en la Guerra Mundial en 1942, Ávila Camacho llamó a colaborar a los principales caudillos, como Cárdenas y Elías Calles y reincorporó al servicio activos a otros generales. En ese tiempo Joaquín Amaro preparó el estudio Problemas de nuestra defensa nacional. En 1952 fue presidente de la república un civil que durante el movimiento armado había obtenido el grado de Capitán Primero, don Adolfo Ruiz Cortines cuyo opositor principal fue el General Miguel Henríquez Guzmán y sus partidarios fueron objeto de actos disciplinarios. Pero para dar cauce a las aspiraciones políticas de los militares oposicionistas se fundó el Partido Auténtico de la Revolución Mexicana desde el cual se denunció la desviación del gobierno de los postulados revolucionarios de 1910.


Victorias

Batalla de San Juan de Ulúa (1825) Tras la consumación de la independencia, aún quedaba el fuerte de San Juan de Ulúa en Veracruz en manos Españolas; gracias al desempeño del bloqueo de los marinos Mexicanos al mando del Teniente de Navío Francisco P. López y del Ejército Trigarante por el General Miguel Barragán, se libraron combates que culminaron con la derrota y toma del castillo. Exhausto, sin víveres ni municiones, el Brigadier José Coppinger capituló y el 16 de noviembre de 1825 entrega el castillo a los Generales Mexicanos, cerrando para siempre la amenaza de la dominación de la antigua España.

Batalla de Tampico (1829) Artículo principal: Batalla de Pueblo Viejo

El Ejército Nacional al mando del Gral. Antonio López de Santa Anna junto con los generales Manuel Mier y Terán y Pablo de la Garza, se enfrentaron a fuerzas españolas que intentaban recuperar territorio Mexicano para España. La derrota se dio el 11 de septiembre de 1829 con la total rendición de lo que quedaba de tropa española. Las banderas de los invasores fueron llevadas ante la Virgen de Guadalupe y El General español, Barradas, se retiró con 4000 soldados y marinos a la Isla de Cuba.



La primera Batalla de Puebla.

El Ejército Liberal tuvo lugar el 5 de mayo de 1862 cerca de la ciudad de Puebla (México), la defensa del Fuerte de Loreto y del Fuerte de Guadalupe, durante la invasión francesa de México. Fue una importante victoria mexicana con resonancia global, pues venció al ejército más experimentado y reputado de la época y se conmemora en México con la fiesta del Cinco de mayo.



Batalla de Miahuatlán


La Batalla de Miahuatlán tuvo lugar el 3 de octubre de 1866 en las inmediaciones de la población del actual municipio de Miahuatlán de Porfirio Díaz en el estado de Oaxaca, México, entre elementos del ejército mexicano de la república, al mando del general Porfirio Díaz y tropas francesas al servicio del Segundo Imperio Mexicano.


Batalla de la Carbonera


La Batalla de la Carbonera fue librada el 18 de octubre de 1866, durante la Segunda Intervención Francesa en México.


Batalla del 2 de abril


La Toma de Puebla de 1867 (mejor conocida como la Batalla del 2 de abril) tuvo lugar desde marzo al 2 de abril de 1867 en las afueras de la Ciudad de Puebla en el estado de Puebla, México, entre elementos del ejército mexicano de la república, al mando del Gral. Porfirio Díaz contra las tropas al servicio del Segundo Imperio Mexicano comandada por el Gral. François Achille Bazaine, compuesta de soldados conservadores mexicanos y franceses durante la Segunda Intervención Francesa en México. La Toma concluiría con la decisiva Batalla del 2 de abril.


Batalla del Carrizal


Combate entre el Ejército Constitucionalista de México y el estadounidense, posterior al combate de Columbus realizado por Pancho Villa, ya sin su gloriosa División del Norte y convertido en simple guerrillero. So pretexto de perseguir al General Mexicano, las fuerzas estadounidenses se sobrepasaron en los límites diplomáticos establecidos, las hostilidades las rompe el General Pershing el 16 de junio de 1916 al retar al General Treviño, aduciendo que su gobierno "no le ha limitado el área de movimientos de su fuerza expedicionaria", por lo cual avanzaría donde creyera conveniente. Cerca de Casas Grandes, Chihuahua, tiene el honor el General mexicano Félix U Gómez el 21 de junio y al ordenar al Capitán Boyd estadounidense, se inició una lucha entre ambas fuerzas, el mando mexicano pasó al Tte. Cor. Genovevo Rivas Guillén con 150 muertos estadounidenses y 72 muertos mexicanos. Pershing no volvió a autorizar un combate y tuvo que salir de territorio mexicano en febrero de 1917 por una orden del propio congreso de su país, humillado, derrotado y con las manos vacías, pues nunca encontró a Pancho Villa.



El Ejercito Mexicano Actual


El Ejército Mexicano tiene implementados tres planes de estrategia denominados: Plan DNI. Diseñado para enfrentar un país o fuerza extranjera enemiga que invadiera el país, problema que si bien que pudiera suscitarse, continúa siendo una remota posibilidad por ser México un país entregado a la paz conforme a la Doctrina Estrada de no intervención en asuntos de otros países y al principio de Benito Juárez cuando expresó: "Entre los individuos como entre las naciones, el respeto al derecho ajeno, es la paz"; el Plan DNII.- El combate a las fuerzas internas que socaven la estabilidad de las instituciones como en el momento actual cuando sostiene un combate frontal al narcotráfico, lo que ha aumentado drásticamente la presencia militar visible en varios estados del país al realizar labores policiales de forma rutinaria sin una justificación legal, y el DNIII que atiende a la población civil en casos de desastres naturales como los huracanes y terremotos. Con este programa (que abundaremos más adelante) el ejército recobra todo lo que pierde con el segundo; y es que el empleo del ejército en tareas policíacas se da en México debido a la corrupción en los cuerpos policíacos municipales y estatales.



En el sexenio del presidente Adolfo López Mateos, se utilizó al ejército en gran escala para detener las movilizaciones laborales de trabajadores petroleros, telegrafistas, maestros y otros sectores; el clímax de tales conflictos se vio primeramente en el paro ferrocarrilero de 1958 cuando aparte de la detención de los principales dirigentes Demetrio Vallejo y Valentín Campa se dio por vez primera la requisa en que los uniformados se hicieron cargo de un servicio manejado siempre por civiles, aun durante la revolución.



La segunda intervención 'policial' por parte del ejército sucedió diez años después con el presidente Gustavo Díaz Ordaz durante el movimiento estudiantil de 1968 en México en la plaza de las Tres Culturas en Tlatelolco. El 2 de octubre de 1968, el ejército aguardaba una señal para emboscar una manifestación estudiantil, con el pretexto de que un grupo armado posiblemente utilizaba al movimiento estudiantil como camuflaje y reclutamiento. Al caer la tarde, cuando los estudiantes se proponían disolver el mitin debido a la presencia militar, una ráfaga de balas proveniente de los edificios cercanos se dirigió contra la manifestación, al principio el ejército reaccionó disparando contra los agresores. Posteriormente se supo que estos agresores pertenecían al Batallón Olimpia, un cuerpo especial creado por el ejército para reprimir al movimiento estudiantil y que en esa ocasión disparó a quemarropa contra la multitud junto con las tropas que entraron a la Plaza de las Tres Culturas con la bayoneta calada. Varios estudiantes resultaron muertos, siendo el saldo oficial de decenas de muertos, mientras que las cifras de la prensa internacional de esos días mencionaron cientos muertos. Era Secretario de la Defensa Nacional el General Marcelino García Barragán, a quien, según diferentes versiones, intentaron convencer de que asumiera la presidencia ante la manifiesta ineptitud de Díaz Ordaz para resolver políticamente los conflictos. García Barragán rechazó tajante tales ofrecimientos. Actualmente, el 2 de octubre es una fecha que se recuerda cada año con una ceremonia en Tlatelolco, sobre todo por organizaciones político-civiles que no olvidan el atentado contra la población estudiantil en ese año.


En el período de Luis Echeverría Álvarez, el ejército tuvo que asumir de nuevo el peso de la lucha contra los movimientos sociales, en este caso, las guerrillas rurales que habían surgido por las condiciones en que viven los campesinos del país. Desde 1977 disminuyó la función policiaca del ejército ante la reforma política que amplió las posibilidades de participación electoral.


En 1994, el Ejército Mexicano se enfrentó durante 12 días contra el grupo subversivo llamado Ejército Zapatista de Liberación Nacional en el estado de Chiapas. El EZLN realmente era una guerrilla pequeña y poco armada comparada con el tamaño y recursos del ejército mexicano. En este conflicto, el enfrentamiento más fuerte fue durante el 3 y 4 de enero de 1994 en el municipio de Ocosingo. Para evitar masacres, el presidente ordenó alto al fuego y el EZLN quedó reducido a zonas de apenas algunos kilómetros en el estado de Chiapas. Aunque durante años el EZLN ha procurado ser identificado como un movimiento armado, realmente nunca hubo más combates y el movimiento de insurrección nunca se expandió más allá de las zonas en las que fue encerrado.


Hoy en día, las funciones principales encomendadas al Ejército Mexicano son, como ya fue comentado, la guerra contra el narcotráfico y la ayuda a la población en caso de desastres (DNIIIe). En el caso de la guerra contra el narco las acciones del ejército no tienen un sustento jurídico y en la opinión de algunos es un intento de imponer un estado de excepción velado con el fin de reprimir y disuadir movilizaciones sociales. Un ejemplo de la ejecución del plan DNIIIe por parte del Ejército Mexicano moderno, es el apoyo que el Gobierno Mexicano hizo a los Estados Unidos durante la inundación de Nueva Orleans, cuando las cocinas comunitarias del Ejército Mexicano viajaron por tierra a Nueva Orleans para apoyar a varios miles de damnificados, siendo ésta la primera incursión militar-humanitaria de México a EE. UU. Misiones similares han sido efectuadas en diversas ocasiones por el Ejército Mexicano a diversos países de América Latina y Asia, donde México ha enviado aviones y barcos con ayuda alimenticia y médica, además de personal altamente capacitado por el Ejército Mexicano.

El Ejército Mexicano es el único ejército en Latinoamérica que en más de tres cuartos de siglo no ha sido protagonista de un golpe de estado, atribuido según los estudiosos, a que su oficialidad no proviene de las capas oligárquicas, sino del proletariado y los sectores sociales medios. Una novedad recientemente introducida es el permitir a las mujeres de participar en todas las áreas del ejército.



Actualmente los Juanes que la Revolución Mexicana formo se han trasformado, en el Ejercito Actual, por lo cual en esta fecha Celebramos los 104 años de su creación, sin más por el momento les agradezco su presencia a este pequeño homenaje a cada uno de ustedes, que tuvieron el Honor de mantener la Paz y la tranquilidad del país, en su momento, Viva el General Francisco J. Múgica, Viva Villa Viva Zapata.