. “GRAL. FRANCISCO J. MÚGICA”
S.R.E.21000586-.EXP.0021000579-.FOLIO
586
Cda. Tonantzin 7 – 101, Col. Tlaxpana, Del. M.
Hidalgo, Méx. D.F., 11370
¡FIRMES!
DEJAR DE LUCHAR ES EMPEZAR A MORIR
CUENTA
BANJÉRCITO 001131677-2
TRANSF.
019180000113167725 nombre de Samuel Lara
Villa
SEPTIEMBRE 2015
PROTESTA
ANTE LA JUDICATURA FEDERAL
Esta Federación se manifestó el pasado
martes 22 del mes de septiembre, ante el CONSEJO DE LA JUDICATURA FEDERAL,
presentando una queja administrativa contra el JUZGADO CUARTO DE DISTRITO EN
MATERIA ADMINISTRATIVA EN EL DISTRITO FEDERAL, por el motivo que desde el año
de 2010, varios Militares en Situación de Retiro de la Primera Reserva de las
Fuerzas Armadas Mexicanas, -algunos ya fallecidos sin poder alcanzar la
justicia- promovieron juicio de amparo reclamando el debido cumplimiento de la
LEY DEL INSTITUTO DE SEGURIDAD SOCIAL PARA LAS FUERZAS ARMADAS MEXICANAS, que
decreta vida digna para este personal igual a la del que aún sirve en el
Activo, en la inteligencia que el último acuerdo de esa dependencia, fue difiriendo
la audiencia incidental para el 27 de agosto de 2014, por lo que a la fecha han
transcurrido más de un año y un mes, sin que haya resolución sobre el
cumplimiento de la ejecutoria de dicho amparo. Acudimos en representación de
los quejosos para exigir se nos haga justicia pronta y expedita según lo
ordenado por Artículo 17 Constitucional. A la mencionada autoridad se le
informó que los Militares el Situación de Retiro continuamos sujetos de por
vida a las Leyes y Reglamentos Militares.
Ustedes, compañeros, deben saber que
fuimos recibidos muy atentamente por las autoridades correspondientes que nos
hicieron saber que pronto tendremos información de la resolución del Juez
citado.
Al evento acudieron en total 40
compañeros, incluyendo 2 de Aguascalientes, 4 de Cuernavaca y muchos del
cinturón Metropolitano, lamentamos informarles que mas de 85mil retirados se
mantienen en su trinchera por “precaución” o por simple apatía, parando las
manos hacia arriba en espera que caiga el maná o alguna caridad de los
funcionarios que sepultaron la Ley del ISSFAM. Otros alegan tontamente que les
pueden quitar la pensión, sabiendo que jamás lo podrán hacer aquellos a quienes
no les faltan ganas, pero la Constitución los imposibilita. Compañeros en
Situación de Retiro, algo hay que hacer para lograr la unidad, para que tomen
conciencia los indolentes sumándose a la lucha por el cumplimiento cabal de la
Ley del ISSFAM -no pedimos nada mas- que decreta VIDA DIGNA para este personal
de la Primera Reserva igual a la de los compañeros en Servicio Activo.
Mañosamente, las autoridades que tienen
por Ley la misión de hacer que se cumpla, obran en contrario otorgando
prebendas de todo tipo al personal en activo, cuidando escrupulosamente que
nunca lleguen al renglón de los haberes para que esos estímulos no alcancen de
ninguna manera a los Retirados, sometiéndoles de esa manera a la discriminación
que los mantiene intencionalmente en la marginación.
Deben saber ustedes, compañeros, que la
solución del C. Juez a favor de los demandantes, vendrá a beneficiar a todos
quienes se encuentran en esa situación de discriminación, luchamos por los
Militares en Situación de Retiro de la Primera Reserva, esa es la razón por la
cual hacemos notar a ustedes, que los responsables de dar la solución. debieran
saber que somos mas de 86 mil Retirados diseminados en toda la extensión de la
República Mexicana, quienes demandamos el cumplimiento de la LEY DEL INSTITUTO
DE SEGURIDAD SOCIAL PARA LAS FUERZAS ARMADAS MEXICANAS.
DEJAR
DE LUCHAR ES EMPEZAR A MORIR.
LA
DISCIPLINA NO ES PARA HACER COBARDES
EL ALUD
No tenía brazos, no tenía piernas, le habían
arrancado los ojos y la lengua y vertido aceite hirviendo en sus oídos. El
tirano en un festín así lo había decretado, pero el corazón no dejó de latir y
un día que abrieron la mazmorra, se lanzó como un tonel en que hubieran
depositado todos los sufrimientos del mundo, como una rueda ensangrentada, como
un tronco empujado por la tempestad. Y así, rodando, rodando, atravezó la
ciudad, entró al mercado y atropellando manzanas y ladrones, puestos de flores
y mendigos, fue a detenerse a los pies del pueblo.
Su sola presencia hizo que se escuchase el rugido de
mil leones. Los ojos vieron, las piernas corrieron, las lenguas pronunciaron
maldiciones, los brazos se agitaron, las manos agarraron puñales y la multitud,
como una incontenible maza de fuego
asaltó el palacio y colocó en su trono a la libertad.
Alfredo Cardona Peña
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